jueves, 27 de septiembre de 2007

ATRACO PERFECTO (STANLEY KUBRICK - 1956)






Las comparaciones siempre son odiosas y mucho más cuando lo que se compara son dos obras magistrales de dos directores magistrales como Huston y Kubrick.

Es cierto que Atraco Perfecto es una copia singular de La Jungla de Asfalto, pero yo no me atrevería a calificarla como imitación. Se imita aquello que no se puede alcanzar y Kubrick tenía categoría para llegar a donde se propusiese. Incluso, voy mas allá, Kubrick con Atraco perfecto confiere un nuevo valor a la obra de John Huston.

Pero a mi siempre me gustó el juego de las 7 diferencias (que no errores) y aunque esto no sea la prensa de la mañana vamos a intentar localizarlas.

1: La precisión matemática del atraco de Kubrick frente a un cierto tono "chapucero" del atraco de Huston

2: La máscara con nariz de payaso. (Kubrick)

3: Marilyn Monroe (Huston) cuya cabeza, al contrario del cuerpo parece poco amueblada pero aún así marca una diferencia visual frente a todas las demás.

4: Luis Calhern (Huston), un gran actor a revisar.

5: Un caniche (Kubrick)

Las 2 restantes se las dejo a ustedes. Seguro que las encuentran. Pero, les repito, que no busquen diferencias en cuanto a la calidad de las películas pues ambas son dos magníficos ejemplares del talento y categoría de sus realizadores.

lunes, 24 de septiembre de 2007

LA JUNGLA DE ASFALTO (JOHN HUSTON - 1950)




Excelente película. ¿Sobrevalorada? No lo se. Puede ser. Pero, en cualquier caso: excelente.

Película que parece "fácil" pero que no lo es. Porque lo verdaderamente importante no es el hecho delictivo que se relata sino los propios delincuentes en su condición de personas, con familias, sueños y motivaciones. "Los ladrones somos gente honrada" como dejó escrito Jardiel Poncela, evidentemente entre muchísimas comillas. Y es en este sentido donde Huston nos regala una de las mejores muestras de personajes y caracteres de la historia del cine, que comprende policías corruptos, dueños de garitos un tanto "blandos", detectives sin escrúpulos, abogados arruinados y fantasmones, y atracadores enseñando fotos de bebés ó soñando con vivir tranquilamente en la antigua granja familiar.

John Huston fue un innovador en este sentido. Hasta entonces las películas de atracadores ó gansters mostraban a tipos duros y sin sentimientos, con una especie de Parkinson avanzado en el dedo indice que les hacía apretar el gatillo con más frecuencia de lo deseable. Vamos, los malos eran rematadamente malos. Odiosos. Tanto que, cuando se "cargaban" a uno la sala aplaudía, todos a una Fuenteovejuna. Pero Huston supone un punto de inflexión, y consigue con su dibujo de personalidades y sentimientos, que nos solidaricemos con ellos, con "her doctor", con el pistolero que sueña caballos y granjas, con el destripa-cerraduras con sueño y falta de descanso por las fiebres de su bebé y con el pobre jorobado, dueño del bar, amante de los gatos y chofer en sus ratos "libres". Y nos solidarizamos tanto que deseamos fervientemente que las cosas salgan bien, que se lleven "la pasta". ¿Seremos cómplices por pensar así?.

Este retrato de psicologías filmado por Huston no sería nada sin la buena labor interpretativa de Sterling Hayden, de Sam Joffe, de James Whitmore y, especialmente, de Louis Calhern. En cuanto a Marilyn Monroe, un papel para ir abriendo boca e ir ensayando aquello del Happy Birthday Mr.President... Poquito más.

Como magnífico homenaje, Kubrick nos regalaría años mas tarde "Atraco Perfecto" (The Killing) pero esa es otra historia...







viernes, 21 de septiembre de 2007

ARROZ AMARGO (GIUSEPPE DE SANTIS - 1949))




Por increíble que parezca se estrena en Italia en 1949. Y es que hasta los italianos estaban más liberados que nosotros en materia de destapes. En esta España nuestra de fajas, fajos y refajos, todos muy púdicos y castos, la película no sólo fue masacrada por la tijera sino que además, sus restos, quedaron postergados hasta los 70 para exclusivo visionado de la progresía.

Claro que, visto lo visto y llovido lo llovido, hoy, casi sesenta años después, lo “indecente” se vuelve absolutamente inocente. Pero, eso sí, la Mangano era mucha mujer antes y ahora, y un muslo suyo valía por todas las rodillas de Claire y zarandajas similares. En materia de mundo y demonio, las francesas quizás sean más espabiladas pero en lo de carne, ganan las italianas por goleada ¿Y donde queda España se preguntarán? Bueno, no lo sabremos nunca, porque todos los celuloides están hechos trizas y que yo recuerde, tuvimos que esperar hasta las Historias de la Frivolidad y la era del destape, para empezar a “conocer” mujer.


En materia cinematográfica pura y dura, la película es un buen exponente del neorrealismo italiano, con el tema más real que pueda existir: La supervivencia. Dentro de este contexto no está de más recordar las características del neorrealismo italiano, y así leemos en Wikipedia: “ se caracteriza por tramas ambientadas entre los sectores más desfavorecidos, abundante en el uso de los rodajes exteriores, con importante presencia de actores no profesionales entre sus secundarios, y, con frecuencia, incluso entre los protagonistas. Las películas reflejan principalmente la situación económica y moral de Italia en la posguerra, y reflexionan sobre los cambios en los sentimientos y en las condiciones de vida: frustración, pobreza, desesperación...”


Si ven la película comprobarán que Arroz Amargo es neorrealismo mezclado, no agitado, con melodrama y aderezado con un buen chorro de tensión delictiva, pero en el fondo, en su esencia, no deja de ser una lucha por la supervivencia, muy bien interpretada por actores sumamente creíbles dentro de este contexto. ¿Qué les parecen Vitorio Gassman ó el mismo Raf Vallone ?.


Respecto a Silvana Mangano no les pregunto. Porque da más la imagen de poder ganarse la vida con el “boogie boogie” (tómenlo en sentido real o figurado, como deseen) más que con el arroz.


Para finalizar: Buena película, con un guión excelente (alcanzó la nominación para los Oscar), bien dirigida, real como la vida misma, impensable para los españoles de aquellos tiempos en que el norte del tobillo femenino era como la inexcrutable selva del Amazonas, con buenos actores y una Silvana Mangano también muy buena...


¿Se la van a perder?.



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jueves, 13 de septiembre de 2007

PESADILLA (ROBERT SIODMAK - 1945)





He dejado dicho que, mientras escribo este comentario, no toquen mi taza de café, que luego vienen los líos y las historias e incluso estoy sopesando seriamente la posibilidad de comprarme una singularizada con dibujitos de Mickey ó del Pájaro Loco, todo sea por la salud.

Esta primera reflexión la entenderán cuando vean la película. Y no quiero darles muchos detalles no sea que me vaya demasiado de la lengua. Pero si puedo decirles que ver Pesadilla de Robert Siodmak es una buena manera de finalizar una dura y monótona jornada de trabajo. En ella encontrarán a un George Stevens en su papel de Harry Quincy, para los amigotes y nadie mas: Tío Harry, que viene a ser algo así como la Tía Tula ó esas tías solteronas que hay en casi todas las familias. Aunque aquí las venden por parejas y si a eso le añadimos una hermana sensata pero viuda, pues ya tenemos a toda la familia en el caserón aristocrático. ¡Ah! Y a Nona, mi queridísima Sara Allgood de quien no tenía el placer desde que vi La escalera de caracol también de Siodmak.

Y la cosa va de relaciones familiares complicadas, de brothers and sisters un paso más allá de lo moralmente correcto. Ya saben, “la gente comenta” ... Y sobre todo va de un director que, es de lo más parecido a Hitchcock que me he encontrado en este universo del cine con suspense.
Lástima de comisión Hays, ya saben aquella de “todas somos puritanas, hermanas, hermanas...” que desmontan el final hasta dejarlo hecho unos zorros. Hasta cinco finales entraron en el bombo. Después de ver la película pongan un poco de imaginación en su vida. Quizás den con el adecuado aunque no sea el políticamente correcto.

EL TIEMPO NUNCA ES SUFICIENTE




A mi el mundo me parece suficiente, lo que me parece, a todas luces insuficiente es el tiempo. Los años tienen la medida de nosotros mismos y por ello son largos en las penurias y excesivamente cortos en las alegrías. Tanto que, a veces llegamos a desear disfrutar menos de nuestras vacaciones para que así parezcan prolongarse más ó a sensu contrario sufrir menos las penas para que, de esta forma, se acorten.

Esta disquisición más propia de un filósofo hombre de letras que de uno de ciencias como este su seguro servidor, viene a colación de la imposibilidad material de dedicar todo el tiempo que me gustaría y sería preciso para dejar algún que otro post en condiciones sobre este noble y gratificante arte de la escritura sobre otro arte, dicen que el séptimo: El cine.

Por ello y en la medida que también vengo colaborando con Filmaffinity en el empeño de animar a los ya amantes del cine y muy especialmente a los cinéfilos de nuevo cuño, al visionado de nuevas películas, preferentemente de esas de toda la vida, vengo últimamente señalando los enlaces a dichos comentarios para que quien sienta interés por su lectura pueda encontrarme allí. Y al propio tiempo, mediante carteles, fotografías ó videos, les ofrezco una pequeña panorámica de la obra en cuestión.


Ello significa que, cuando la película no conste en la base de datos de Filmaffinity será valorada en su totalidad en este blog. Todo sea, como espero comprendan, en aras a la rentabilidad de un bien escaso, el más escaso de todos y por ello el más apreciado: El tiempo.

viernes, 7 de septiembre de 2007

SOLO SE VIVE UNA VEZ (FRITZ LANG - 1937)






En los comentarios a esta película he leído esto: “Lang deja atrás su expresionismo alemán” y yo me pregunto: ¿Cómo se hace esto? ¿Basta con dejar la maleta de lo que has sido en la orilla del camino, léase la frontera americana?.

Muy al contrario creo que Lang no solo no lo deja atrás sino que lo incorpora al cine USA. Bueno, más que decirlo yo, lo dicen críticos como Dennis Schwartz "Ozus' World Movie Reviews": “ Film a caballo entre el fatalismo, un oscuro expresionismo alemán y un escenario a lo Bonnie and Clyde”. Y, en mi opinión, de esa incorporación resulta altamente beneficiado el cine americano.


La comparación con la historia real de Bonnie and Clyde es inevitable como lo es también la referencia a Los amantes de la noche aunque, para mi, Lang supera a Nicholas Ray. Pero esto es una opinión y como todas, discutible.

 Buen trabajo de Henry Fonda al que siempre miro con recelo en todas sus interpretaciones pero que siempre acaba convenciéndome y, sobre todo, un trabajo muy personal de Lang, donde no reniega en absoluto de sus orígenes sino que, muy al contrario, los pone al servicio de las barras y estrellas. ¿El resultado?: Francamente bueno, aunque haya quien hable de obra menor.


¡Denme muchas obras menores como ésta!.



jueves, 6 de septiembre de 2007

EL ULTIMO REFUGIO (RAOUL WALSH - 1941)


Como ya afirmé en el comentario de Callejón sin salida de John Cromwell, Bogart is Bogart. Porque Bogart es genuino, como el tabaco rubio americano. Bogart es él y su estilo, y quiero citar un comentario de Kevin Koehler en la página web Pretentious Musings : “ High Sierra fue un film clave en la transición de las películas de gangsters estilo James Cagney a la era del cine negro definida por Bogart”.

“Sui generis” Bogart... Pero claro, uno no se acuesta por la noche siendo un desconocido y se despierta marcando estilo. La cosa va un poco más despacio. Por ello, aunque en “El último refugio, ese chico Humphrey ya apuntaba y muy alto, todavía Bogart no era Bogart. ¡Vaya lío! Pero seguro que me entienden.

De duro, va sobrado, de buenos sentimientos lleva exceso de equipaje pero de esa socarronería, de ese andar un poco como de vuelta de todo, de esa forma especial de dar una calada al cigarrillo, de eso que no se enseña en las academias ni está escrito en el guión pero que queda plasmado en el celuloide, de eso todavía le falta. Y es natural. Los años ennoblecen el vino.

De cualquier manera nos encontramos ante una película interesante, con una Ida Lupino que, aunque vaya por delante de Bogart en los títulos de crédito, y trabajando bastante bien, queda a la sombra de quien sería a partir de aquí uno de los mitos universales del legado de los Lumière. Y no debemos olvidar la presencia en el guión de John Huston, iniciando de esta manera sus colaboraciones con Humphrey Bogart que nos dejarían obras insignes como El Halcón Maltés, La reina de África, El tesoro de sierra Madre ó Cayo Largo.

Y si encima es de Raoul Walsh pues ya está dicho todo...

miércoles, 5 de septiembre de 2007

MIENTRAS NUEVA YORK DUERME (FRITZ LANG - 1956)




Mientras Nueva York duerme fue calificada por Lang como su mejor obra. Miren, no se si es la mejor. No las he visto todas. Pero les diré que es buena, muy buena. Tal vez no perfecta pero sí magistral. Valga la diferencia. Tan magistral que ha conseguido quitarme el mal sabor de boca que me dejó la infumable aparición de Lang en la bobada de Godard “El desprecio”. Tan magistral que me ha permitido reencontrar a ese Dana Andrews, cínico a lo Mitchum, que no encontraba desde Laura de Premminger, ó a un George Sanders en su línea de Eva al Desnudo, en este caso con menos cinismo pero igual de profesional, a una Ida Lupino, en un registro muy distinto al de la invidente de La casa de las sombras de Ray pero con una carga de madura sensualidad capaz de llevarse por delante carros y carretas, a un Vincent Price, de malvado pero diferente y sobre todo encontrarme con un Thomas Mitchell del que ya he dicho tantas cosas en comentarios anteriores que ya no se que más decir.

De cine negro tiene auténticas y genuinas pinceladas pero sobre todo es cine de ambiciones, de gentes con y sin escrúpulos, cine de te amo mientras me sirvas, cine mediático, de la comunicación al poder y del poder de la comunicación. Auténtico precursor ese Fritz Lang de lo que es el pan nuestro de cada día en materia audiovisual y sobre todo precursor del periodismo de investigación.

En minúsculas, solo un pero, el final parece resolverse demasiado fácilmente y ese pobre infeliz al que conocemos desde el principio, con su carga psicológica ó psicopática a cuestas, pues parece de recursos escapistas limitados y de una ingenuidad ilimitada. Aunque en este caso, la historia del asesino del lápiz de labios es la menor de las dos historias. La otra, la de las fieras instigadas a despedazarse entre si, un poco como los tiburones de La dama de Shanghai despedazándose unos a otros, esa historia es la que cuenta.



LOS AMANTES DE LA NOCHE (NICHOLAS RAY - 1949)


  Miren, cuando comenté On dangerous ground (La casa en la sombra) de Nicholas Ray, ya hablé de contrastes, de violencia y sensibilidad, de ideas ejemplarizantes y de la maestría de Ray acompañada por una fotografía y una música de auténtico lujo.

Por ello, creo que quedará fuera de sospecha mi admiración por este director. Director que, al igual que todos, tiene su “opera prima”: Los amantes de la noche, y no tengo ninguna duda que en competición con otras alcanzaría el grado de “primus inter pares” ó cuando menos ocuparía plaza en el podium cinematográfico.

Los amantes de la noche anticipan esas ideas y valores de los que hablaba, violencia y sensibilidad, y la película es más un mensaje que un entretenimiento. Pero que no nos deslumbre más allá de lo necesario, tan sólo era un buen vino joven al que le faltaba maduración.

En confianza, mis comentarios tienen en cuenta la vida y milagros del director, si la música es apropiada ó si los encuadres enganchan la mirada del espectador, pero sobre todo, lo que más valoro de una película es si alcanza mi sensibilidad, para alegrarla ó herirla según los casos. Y en este, apenas la roza. Tal vez la “culpa” sea de Farley Granger al que me imagino siempre a punto de echarse a llorar, aunque tratándose de sentimientos, es muy probable que Ray lo eligiese por lo mismo

Resumiendo, como toda “ópera prima” que se precie, a la película le falta dinero, lo cual es normal, y por el contrario, le sobra ingenuidad (pues ingenuo es creer que a base de nuevos y verdaderos delitos se va a redimir del delito no cometido) y también le sobra Farley Granger, y se echan de menos algunos momentos mas como esa mirada del marido preso a su mujer tras la traición de ésta.

Por último y para no cansarles, según el productor Houseman la escena del coche atravesando una llanura polvorienta fue la primera en la historia del cine USA que se filmó desde un helicóptero. Los personajes vistos desde el cielo querían significar según Nicholas Ray “la larga mano del destino yendo hacia ellos”. Tal vez sea oportuno sugerir a quienes se mueven en esto del cine que, para que el espectador pueda valorar en su justa medida trabajos y escenas tan singulares y tan “de profundis” modernicen las proyecciones con auriculares informativos, lo mismo que en los museos de relumbrón, ó alternativamente regalen en taquilla un libro de instrucciones.

martes, 4 de septiembre de 2007

LA SENDA DE LOS ELEFANTES (WILLIAM DIETERLE- 1954)



Esta película suscita odios enconados y amores extremos. En Reel Film Reviews leemos: “La senda de los elefantes es un melodrama asombrosamente malo y completamente aburrido”.

Brian Koller en Epinions.com afirma: “La senda de los elefantes es una no intencionada comedia y es una buena manera de emplear dos horas.” En Cine Escondido (blog interesante) leo : “imágenes que parecen animadas de vida propia, que justifican el visionado de la película por sí solas, y que componen algunos de los instantes más electrizantes de la historia del cine” refiriéndose a las secuencias finales, si bien previamente el comentarista nos había regalado lo siguiente : “Tiene a unos chicos que no se creen demasiado sus papeles de marido atormentado por el espíritu de papi, el uno, y de seductor fracasado, el otro (Peter Finch y Dana Andrews, respectivamente)... ¿Qué puede quedar de la película después de asistir a tamaña exhibición de insustancialidades cinematográficas?”.

Bueno, pues en esta marabunta de opiniones absolutamente extremas, les dejo la mía por si les sirve:

Cuando ví Esmeralda la zíngara, afirmé que Dieterle era un director para revisar. Y eso es lo que he hecho y aunque de una a otra película pasaron nada mas y nada menos que quince años, la sombra de Dieterle es alargada y llena completamente la película. Y si me apuran el trabajo de dirección es mucho mas meritorio al no contar con la interpretación de un auténtico monstruo en todos los sentidos, el del jorobado Quasimodo y el del probablemente mejor actor del mundo mundial: Charles Laughton. Aquí se las tiene que ver con Peter Finch, Elizabeth Taylor y Dana Andrews que, aunque buenos actores, dignos, creíbles y profesionales no “llenan” la pantalla como Laughton.

Comulgo con la ideas recogidas en el post de Cine Escondido al respecto de las escenas finales que, aunque predecibles, y no tan electrizantes, nos dejan ese buen sabor cinematográfico y esa magia que algunas películas consiguen transmitir. Evidentemente los 103 minutos no son así, que si lo fuesen no estaríamos aquí comentando la película sino reverenciándola.

¿Película dirigida al público femenino?: Esto se afirma en algunas críticas leídas. Bueno, a mi me gustó y les aseguro que estoy libre de toda sospecha. ¿Dirigida al público infantil y juvenil?: Evidentemente no, por su contenido melodramático y triangular, pero estoy convencido que los ojos de los chavales se abrirían como platos ante el desfile inexorable de los paquidermos en busca de su destino.

Por ello, con absoluto respeto a los reconocidos críticos americanos, les digo que todos se equivocan, que sin ser la octava maravilla es una película con sus defectos pero también con sus virtudes. Con un William Dieterle que deja su impronta en todo el film y especialmente en las memorables secuencias finales y con tres actores que lo hacen bien, bastante bien.

¡Ojalá pudiésemos decir esto de muchas películas!.



lunes, 3 de septiembre de 2007

EL DISCRETO ENCANTO DE LA SERIE B



John Sturges no es un cualquiera, no señor. Suya es la mítica “Los siete magníficos” que es uno de esos recuerdos que, como las flechas del amor, van contigo donde quiera que tu vas, te acompañan en las transiciones personales de la juventud a la madurez y, muy probablemente nos harán jugar a pistoleros incluso en residencias para la tercera edad. Pero la cosa no queda ahí. En el mismo lote van incluidos otros trabajos suyos como Conspiración de silencio (magistral), La Gran Evasión (excelente) ó El último tren de Gun Hill (muy buena).


Pero, en mis expediciones arqueológicas cinematográficas me encontré con Mistery Street, mas traducible por El misterio de la playa, obra de Sturges que deja constancia de su buen hacer y encuadrable en la serie B mas que nada porque el poderoso caballero don dinero así lo quiso. Montalban ni al cero es Yul Brynner, ni tiene la autoridad de Spencer Tracy ni el feeling de Steve Macqueen pero la obra se salva por su guión que no decae en ningún momento a pesar de que el pescado está totalmente vendido desde el principio y no existen mayordomos asesinos que descubrir.

Pero el cine no es solo Casablanca ó Ciudadano Kane. También son cine estas obras menores. No solamente la burguesía tiene su encanto (discreto). La plebe (léase serie B) también lo tiene, probablemente mucho más discreto y escondido, pero encanto al fin y a la postre. Y resulta gratificante encontrarse, ya sea por azar puro y duro ó por caprichos del destino en forma de Internet con piezas arqueológico-cinematográficas de este calibre.

Sirva este post para reivindicar la serie B. En cine, la frase “El dinero no consigue la felicidad” se traduce por Serie B, aunque también se escuchan otras traducciones como Serie Z cuando la cosa adquiere tintes más graves y ni rompiendo el cerdito hucha se alcanza el presupuesto. Y dentro de esta línea de reivindicación me gustaría recomendarles un blog descubierto sobre el tema en este mar de mares que es Internet: Cinema de perra gorda, dirección:
http://thecinema.blogia.com/2005/042101-mystery-street-1950-john-sturges-.php

Allí podrán disfrutar de un comentario muy trabajado sobre Mystery Street y que deja al que suscribe a la altura del betún. Pero no se preocupen, no me importa. También es positivo ser el correo del zar ó el camino que conduce a Shagri-La (paraíso tibetano).

Ah, y no conozco de nada al titular o titulares de ese blog. Solo que me pareció muy bueno. Aunque por las películas tratadas mas que de perra gorda se trata de cine de muchos quilates.

De nada...



EN CONFIANZA




Mis desconocidos y casi inexistentes lectores y yo vamos cogiendo confianza. En esta línea de intimidad y tuteo quiero confesarles que además de mis reflexiones aquí presentes sobre cine, mas cercanas al surrealismo de Groucho Marx que a otras filosofías descartianas, vengo también colaborando desinteresadamente y por amor al arte cinematográfico con una página Web excelente: Filmaffinity, donde podrán encontrar, a día de hoy, 140 críticas personalísimas sobre distintas películas, de todos los géneros, épocas, directores, estilos, etc. Vale, es publicidad, pero ya he pasado por mi taquilla y la he abonado religiosamente.

Digo esto, no solo por hacerme famoso y salir en tomates, salsas y otros manjares gastronómicos de este mundo cruel, sino sobre todo para justificar mis tiempos de ausencias de esta sala multicines, de este blog de encuentros y desencuentros cinéfilos. Si hay algo escaso en esta vida eso es, sin duda, el tiempo y mucho mas si se tienen que compartir las horas de PC con hijos en edad de merecer y messengear (valga el palabro).

Filmaffinity es una web muy interesante que cuenta con una amplísima base de datos, un gran número de usuarios y visitantes y que cuida, muy profesionalmente, de la calidad y corrección de los textos que allí se publican. ¡Ah! y está en español.



Por las alabanzas anteriores no cobraré nada, por esta vez, para que no se me tilde de pesetero. En otra ocasión, ya negociaremos...

Entre mis comentarios allí publicados, se pueden encontrar obras de Truffaut (La noche americana, Jules et Jim, Fahrenheit 451, Los cuatrocientos golpes), Frank Capra (Horizontes perdidos, Sucedió una noche), Ernst Lubitsch (Ninotchka, Un ladrón en la alcoba), Murnau (Tartufo, Amanecer), Fellini (La Strada, Amarcord, La dolce vita, Ocho y medio), John Fod, John Huston, Louis Malle, etc, etc, etc ... La lista es exhaustiva. 140 films son suficientes, aunque el cine “nunca es suficiente”.

Pero hay películas que no figuran en la base de datos de Filmaffinity y por ello no son susceptibles de ser comentadas. Es el caso, por ejemplo, de Mistery Street de John Sturges ó de Murder is my beat de Edgard G. Ulmer, entre otras. Por ello y para dejar constancia en las autopistas electrónicas de mi parecer, más íntimo y personal que académico, me refugio en este mi terruño particular, robando horas al tiempo y a mis hijos, que por cierto ya empiezan a estar desesperados de tanta disquisición “de profundis”.

Por ello,y porque debo levantar mis reales de este sillón, quedo con ustedes para una próxima ocasión donde les hablaré de Mistery Street ó los encantos de la serie B.


CINE PALOMITAS


Dada la profusión de categorías en que se dividen las artes cinematográficas, léase, por ejemplo, cine serie B, expresionismo alemán, nouvelle-vague francesa, cine negro ó road-movies, entre otras, no se si sería demasiado atrevimiento por mi parte proponer el establecimiento de un nuevo género: El cine palomitas ó si lo prefieren el pop-corn movie.

A lo mejor ya está inventado, que en estos años que corren es prácticamente imposible ser original. Bueno, si fuese así, mis disculpas y, sobre todo, mi reconocimiento a los creadores del palabro, y muy especialmente a aquellos que sean capaces de delimitar su concepto en una definición que resulte clarificadora sin extenderse demasiado. Podría ser algo así como Cine palomitas: Modalidad de cine en que el visionado de la película va unido, indefectiblemente, a la ingestión de palomitas de maíz.

Muy probablemente nos encontraremos sectores del colectivo de espectadores cinematográficos que defiendan la tesis, doctoral ó no, de que todo el cine es en el fondo cine palomitas. Que las palomitas son como las patatas chips que pegan con todo. Sinceramente, no me hago a la idea de estar viendo Fresas Salvajes de Bergman comiendo palomitas. ¿cómo se puede intentar reflexionar sobre este “fugis mundi” con la boca llena de maíz reventón?. Es como visitar Nôtre Dame de París con chanclas y bañador. Y no se trata de que hayan ó no celosos guardianes que lo impidan sino de que hay cosas que no pueden ser y además son imposibles y si alguien pretende hacer esa visita vestido de tal guisa es que lo que va a visitar y lo que representa le trae completamente al pairo y para eso sería mejor que dedicase el tiempo al refresco y bronceado que a recorridos culturales de que presumir a la vuelta vacacional.

Hay películas indigeribles si no es a base de su buen cucurucho palomitero. Es el caso de “Déjà-vu” de Tony Scott. Hay otras en que el gramíneo elemento no es absolutamente imprescindible pero resulta muy necesario. Tal es el caso de El código Da Vinci de Ron Howard, Y para terminar, hay casos en que las palomitas sin ser imprescindibles ni muy necesarias, constituyen el complemento ideal, algo así como un reforzante vitamínico. Vease Twins (Los gemelos golpean dos veces), con un Arnold Schwarzenegger para recordar (no volverlo a ver) y un Danny deVito en esa línea suya cómica absolutamente peculiar y que llega al espectador.

Podría proponerse la elección de las 100 mejores pop-corns movies de la historia. Habrá que estudiarlo. Se admiten sugerencias. De momento ahí quedan las tres citadas.