En verdad “El rey del tabaco” ha resultado ser una sorpresa agradable. Bueno, sorpresa relativa, porque Michael Curtiz a la dirección, Gary Cooper, Patricia Neal y Lauren Bacall como trio protagonista principal y las participaciones de Donald Crisp uno de esos secundarios de lujo al que vengo siguiendo desde ¡Que verde era mi valle!, junto con la aparición efímera de Gladys George en un papelito de apenas lucimiento, eran mimbres más que suficientes para un cesto de artesanía.
Un film que les recomiendo encarecidamente porque a pesar de sus “peros”, que los tiene, la resultante se me figura positiva, aunque no les engaño y es probable que se encuentren con un Gary Cooper un tanto distinto a lo acostumbrado y como si no acabase de situarse bien en el foco central de su personaje. A su lado Patricia Neal, con quien había trabajado con éxito en “El manantial” y con quién, por aquel entonces, mantenía una conocida relación sentimental extramarital. El personaje de Patricia resultaba odioso a los ojos del espectador, tanto que hasta su propio padre (Donald Crisp) llega a decirle en una escena llena de fuerza “Nunca en esta familia se ha engendrado nadie como tu”, dicho en sentido despectivo. Miss Neal nunca estuvo de acuerdo con tal personaje e incluso movió cielo y tierra para que se le asignara el rol de chica buena y abnegada que interpretó Lauren Bacall. Ciertamente, su compañero sentimental, Cooper, no quería problemas y no se implicó demasiado.
Y por lo que hace, al rol de Sonia interpretado por Miss Bacall, resulta de una abnegación escasamente creible al tiempo que la química con nuestro protagonista se nos figura prácticamente nula. Y cuando hablamos de química no nos estamos refiriendo ni a la belleza de la actriz ni a su trabajo interpretativo que , dentro de lo exigido por el guión, cumple razonablemente.
Aun así se la recomiendo. Y lo hago por un argumento que sobrepasa a la elección de los personajes, y que mantiene nuestro interés a pesar de que sentimos como Gary Cooper se encuentra a disgusto en su papel de hombre de negocios vengativo, tiránico, prepotente y un sinfín de perlas más. La pérdida de valores de Cooper respecto a otros films emblemáticos suyos no ayuda. El mal dibujo de Sonia como Penélope en el banco del andén, tampoco. El forzado acoplamiento de Patricia Neal a un personaje del que trató de escapar flota en el ambiente. Por descontado que excluyo a Donald Crisp, sin duda de lo mejor del film.
Pero la historia nos gana, nos abduce y las casi dos horas de su duración se nos figuran casi cortas. Quizás busque un efectismo final que podría haberse evitado. Pero opino que hasta le viene bien.
Quizás todo lo que acabo de explicarles se resuma en un detalle, la crítica rechazó el film, el público lo aplaudió intensamente. En mi opinión, otra elección de actores, siendo buenos éstos, hubiese igualado ambas valoraciones.
Puntuación: 7,10
8 comentarios:
No hace mucho me la confundí con La ruta del tabaco, de John Ford. Cuando me puse a verla me di cuenta que no era aquella que me había gustado tanto cuando a penas era un recién adolescente. La de Ford está también muy bien. Gene Tierney muy guapa, como siempre, pero la de Gary Cooper tengo muchas ganas de volverla a ver. Me quedó un grato recuerdo de ella. Que no la pongas demasiado bien me hará verla con cierto recelo (me refiero a la parte menos convincente).
Un saludo, FATHER.
Javier: Gracias por tu visita. Nada que ver con la de Ford, muy muy superior. El retrato que hace el genial director de la depresión norteamericana es espléndido, con dureza no exenta de un toque humorístico que tal vez acabe haciéndola más dura. Y una primeriza Gene arrastrándose por un nabo es todo un lujo cinéfilo.
Curtiz hizo muchísimas películas y tiene una merecida fama de buen realizador pero no es John Ford y El rey del tabaco es un film digerible, que como digo abduce por momentos, y que seguro volverás a ver con agrado, pero no es lo mismo...
Un abrazo.
Los peros que destacas son tantos que asustan aún después de leer la positiva valoración global. A mi me pasa que la historia no la valoro tanto en una peli como la buena puesta en escena y, en la escena, manda el actor y su director.
Pero miraré a ver, que doy mucho crédito a la opinión del blog y estoy seguro que esta vez también acierta-
UN SALUDO
Pues siento discrepar tanto con Father como con Javier Simpson pero a mí "La ruta del tabaco" de John Ford me parece de las más flojas de ese fecundo periodo del gran director (si mal no recuerdo es de los mismos años que "Las uvas de la ira" y "Qué verde era mi valle"). Me aburrió mucho y no conecté con ella. Y eso que el cine de Ford para mí siempre es sagrado pero en este caso no me convenció a pesar de ser un film más que notable.
En cuanto a "El rey del tabaco" de Curtiz estoy de acuerdo con Father que choca ver a un icono como Cooper en ese personaje moralmente discutible, cretino y antipático (aunque el final lo redima un poco). Aún así es una película entretenidísima y muy recomendable. Por cierto, Donald Crisp pertenece a esa clase de actores (tipo Walter Huston, otra debilidad mía) que nunca está mal haga el papel que haga.
Amado: Gracias por tus palabras. En verdad solo trato de explicar lo que veo, o mejor, lo que siento al ver una película. Y hacerlo en un lenguaje exento de parafernalias cinéfilas que a veces enturbian mas que clarifican el mensaje.
Mi opinión es que en una película son muchos los factores que deben considerarse pero el argumento aglutina todos ellos. Una buena interpretación en una película que no llega, se diluye algo. Lo mismo para la música, decorados, fotografía, etc. Es tan solo mi opinión.
La película, por su argumento deja verse pero tiene muchos "peros" No obstante no es una mala opción.
Gracias por estar ahí.
Amigo DC: Parodiando a los franceses, "Vive le discrepance" (excuse-moi mon français) De cualquier modo, la comparación con Que verde era mi valle o Las uvas de la ira, es injusta para La ruta del tabaco y la hunde en el abismo. Y es que estas son dos obras maestras de la historia del cine.
Quizás no discrepamos tanto, especialmente por lo que dices de que es un film mas que notable.
En lo que hay absoluto acuerdo es en lo de Donald Crisp, uno de esos actores de reparto de auténtico lujo al que gusta encontrar en cualquier película.
Lo tengo equiparado al mismísimo Thomas Mitchell lo cual ya es decir, y ciertamente Walter Huston es otro magnífico actor por lo que te alabo el gusto.
La vida sin discrepancias sería un aburrimiento.
Un abrazo.
Yo también iba confundido con "La ruta del tabaco". La conseguiré más que nada porque me encantan Patricia Neal y Donald Crisp, el mejor cura irlandés del cine. Cooper también me gusta pero sin duda es algo inexpresivo.
Saludos. Borgo.
Patricia Neal es una actriz a revindicar. Sin el nombre de otras merece un repaso a su filmo. A Crisp lo encontre en Que verde era mi valle y me quedé enganchado. De Cooper está todo dicho hasta esa inexpresividad de la que hablas pero que sin duda ha imprimido caracter a algunos de sus personajes.
Un abrazo
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