martes, 2 de diciembre de 2008

ROMA (FEDERICO FELLINI- 1972)







Una película poco convencional (dicho por Fellini en el prólogo) no puede ser comentada convencionalmente. Por ello no me voy a entretener en el trabajo de los actores ni en la coherencia del guión. Roma es… la vida misma. En Roma, obviamente. Una vida que se torea el calendario y va hacia delante o hacia atrás según conviene. Ahora estamos en el 71 explorando los subsuelos romanos, ahora estamos en los inicios de la guerra comiendo un plato de caracoles, ahora asistimos al desalojo de una juventud que pregona aquello de haz el amor y no la guerra, ahora estamos haciendo cola en los burdeles, esperando la matrona romana de nuestros sueños.

Y en el sustrato de todo, el propio Fellini, como guía del espectador por el espacio-tiempo de su vida amamantada por la loba romana. Un Fellini menos estructurado que en Amarcord aunque más inteligible que en otras películas suyas. Un Fellini que narra la historia pero que al mismo tiempo se detiene en las críticas mordaces de los estamentos reconocidos. La pasarela Cibeles romana sigue impactando, a pesar del tiempo transcurrido, con su fotografía barroca y esos simbolismos fellinianos un tanto difíciles de aprehender para el espectador algo ajeno a su filmografía.

Mas que un conjunto, es una sucesión de secuencias donde se derrama la vida en la ciudad inmortal, al amparo del Coliseo, de la plaza de España o de la Basílica de San Pedro y justamente al lado, las prostitutas haciendo la carrera, los burdeles baratos y los caros, iguales en el fondo, distintos en la forma y en el ascensor, las mesas en la calle, las comilonas, lo soez coexistiendo con la cultura del Imperio. Roma eterna. Roma de los 40. Roma del 72. Siempre la misma. Siempre bella. Siempre felliniana.





5 comentarios:

Esther dijo...

Hola, me gusta este blog y me gusta muchísimo el buen cine. Lo sigo y me lo paso muy bien leyéndolo. Un fuerte abrazo.

FATHER_CAPRIO dijo...

Supongo que cuando uno empieza a escribir algo y a meterse en este mundo de los blogs no cree que lo que escribe tenga interés más allá de lo personal. El blog se concibe más como un Diario de recuerdos que como tablón de anuncios. Por ello cuando se reciben comentarios como el tuyo la autoestima se revaloriza y percibes un poco el significado de eso que llaman la Aldea global.

Muchas gracias, sinceramente.

Jack dijo...

Tu y yo sabemos que no nos hemos puesto de acuerdo para comentar a Fellini. Roma me gusta mucho aunque no la pondría entre sus películas cinematográficamente buenas. Cuando prepare la próxima entrada tendré el cuidado de ver si el maestro está publicando sobre lo mismo. Más que nada para no quedar yo en ridículo. Saludos

Pepe del Montgó dijo...

La entrada a Roma con la circulación, la lluvia, las prostitutas, etc. es de antología. Un desfile como el del Vaticano nunca se había visto. ¿Y la visita a la casa de putas? Maravillosa película.

Anónimo dijo...

El póster es antológico.

Saludos.